
En las otras temporadas Gasol ya estaba de vuelta en el mes de abril. Pero las cosas han cambiado mucho: “quien me hubiera dicho a mi hace cuatro meses que disputaría la final de la NBA”, explicó el jugador que confesó estar “muy cansado pero orgulloso a pesar de ese final amargo”. Atrás queda la humillante derrota en el sexto partido de la final, un encuentro que tocó anímicamente al jugador: “fue muy doloroso”, confesó Gasol. “Nunca he sido una persona conformista. Sólo tengo ganas de volver el año que viene, hacerlo mejor y ayudar al equipo”, alentó el de Sant Boi.
Inconformista y ganador, Gasol ya piensa en Pekín. Unos Juegos “muy competitivos”, vaticinó el catalán; “no hay que infravalorar a ningún equipo, todos querrán ganar”. Precisamente, uno de los favoritos es Estados Unidos, que con los mejores jugadores de la NBA, entre ellos su compañero Kobe Bryant, quiere volver a reinar en el baloncesto. “Es un equipo muy fuerte pero se tiene que ver como funcionan como conjunto”, matizó un Gasol que con Bryant en el vestuario se picaron para ver quién regresaba con el oro olímpico; “te pondré las cosas difíciles”, le advirtió el español.